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Contar con el mejor seguro de salud sin carencia te permite acceder a la atención médica desde el primer día, evitando esperas en momentos clave. En este artículo descubrirás qué significa prescindir de los periodos de carencia, qué coberturas ofrecen estos seguros, por qué es especialmente relevante para embarazadas, cómo elegir tu mutua sin carencia (y cuáles son las mejores opciones) y mucho más. ¡Toma nota!
La carencia en un seguro médico es el tiempo que transcurre tras la contratación hasta que ciertas coberturas entran en vigor.
Por lo tanto, un seguro sin carencia permite acceso inmediato a las principales coberturas (urgencias, consultas con médicos de familia y especialistas, pruebas diagnósticas básicas) evitando estas demoras.
Esto es especialmente importante si necesitas atención inmediata por razones personales, familiares o profesionales.
El mejor seguro de salud sin carencia, como mínimo, debería incluir las siguientes coberturas:
Como hemos dicho, la carencia tiene que ver con el tiempo y hay situaciones donde el tiempo es un factor muy importante. Por ejemplo, durante la gestación. Por eso muchas personas se preguntan si existen los seguros para embarazadas sin carencia. Hablemos sobre ello.
Una de las razones más habituales para buscar el mejor seguro de salud sin carencia es el embarazo. Lo complicado es que la mayoría de aseguradoras aplican periodos de carencia bastante largos (de hasta 8 o 10 meses) para cubrir el seguimiento, las pruebas o el parto.
Así que, si ya estás embarazada, lo normal es que no puedas acceder a esas coberturas desde el primer día.
Ahora bien, ¿hay seguros para embarazadas sin carencia? Sí, pero no abundan. Algunas compañías eliminan las carencias si vienes de otra aseguradora (lo que se conoce como portabilidad), o lanzan promociones temporales en las que las reducen o las eliminan del todo, incluso para el embarazo.
Eso sí, suelen tener condiciones muy concretas. Por eso, si estás embarazada y quieres asegurar la asistencia desde el primer momento, conviene comparar bien y leer con calma la letra pequeña.
Contratar una mutua sin carencia puede ser una excelente alternativa si necesitas acceder a servicios médicos de forma inmediata.
Aunque todas las pólizas suelen tener periodos de espera para ciertas coberturas (como intervenciones quirúrgicas, hospitalización o embarazo), hay algunas compañías que ofrecen seguros sin carencias desde el primer día en circunstancias concretas.
Como ves, lo habitual es que las carencias existan, pero no para todos los servicios médicos. Además, es común que si provienes de otra aseguradora con una póliza similar a la que vas a contratar y cierto tiempo de antigüedad (un año normalmente), la carencia del nuevo contrato no se aplica.
<H2> ¿Cuánto cuesta un seguro de salud sin carencia?
El precio de un seguro de salud sin carencia varía según la edad, el número de asegurados y las coberturas incluidas. A modo orientativo, estos podrían ser algunos precios del mercado:
El coste también dependerá de si eliges una mutua sin carencia con cuadro médico o una aseguradora con reembolso. Sin embargo, si quieres comparar seguros de salud sin carencia de forma sencilla, hoy en día es súper simple. Basta con usar un comparador de confianza y en minutos tendrás un análisis delante de tus ojos para que puedas elegir tu póliza.
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